Departamento de emprendimiento
Apicultura joven. Así es como definen su proyecto Mattin Jauregi e Ignacio Arin. Trabajan con la raza autóctona, la abeja negra, que como consecuencia de casos de hibridación con otras razas, se ha ido perdiendo con el tiempo. La mayoría de sus abejas viven en Bedaio, bajo el monte Balerdi –de ahí su nombre–, pero también las mueven según las características de las flores que necesita cada producto final. Más allá de la apicultura tradicional, buscan innovar e introducirse en la gastronomía: no solo con los típicos productos como la miel o el propóleo. También con nuevos subproductos, como los dulces, el praliné de miel, el polen fresco o la hidromiel.